Amada Junta Kármica
Amados Hijos:
Tengo el honor y el agrado infinito de transmitirles unas palabras hoy, como Vocera de mis Queridos hermanos integrantes de la Junta Kármica.
Estamos agradecidos con todos los que nos han escrito sus Cartas desde el corazón, las cuáles vamos a atender con sabiduría y máximo interés.
Hay un punto que queremos expresarles y que es fundamental: Es el de la Comunicación con Nosotros a través de la Plegaria, sea cual fuere el método que cada uno haya elegido.
Amarse, aceptarse, perdonarse, librarse de la culpa y la vergüenza, creer a pesar de todo, son elementos claves para el éxito de sus oraciones.
Pueden crear una afirmación que les ayudará muchísimo:
YO ME AMO, ME ACEPTO, ME PERDONO, SOY INOCENTE, ESTOY DISPUESTO A CREER, A CAMBIAR Y A AMAR LA VIDA.
Si no se aman, si no se aceptan, si no se perdonan, si no se libran de la culpa, y dejan que el ego reemplace la fe, su oración se bloqueará y su relación con nosotros será difícil de establecer.
Es cierto que están lidiando en la dualidad con entidades negativas que los acosan. Pero muchas veces sus plegarias no tienen efectividad porque ustedes las neutralizan, precisamente por no amarse, no aceptarse, no perdonarse, no creer y culpabilizarse. Deben pues trabajar para que podamos bendecirlos como se merecen.
Déjense guiar, crean en nuestras señales, cálmense, y sentirán nuestra presencia.
No hagan sus Códigos Sagrados con angustia, el temor es una trampa del ego. El ego es terrorista, imagina lo peor, busca confundirlos. Busquen la relajación y el silencio. Antes de tomar una decisión, escuchen su interior.
Muchas veces nosotros queremos manifestarnos a ustedes, pero ustedes nos temen, les mandamos señales y las ignoran.
Tratamos de hablarles con los Números, las Plumas, los Aromas, las canciones.
Hay personas que tienen sentimientos muy negativos en su alma, y esto obstaculiza el pedido. De la misma forma a veces piden cosas que no les convienen, o no es el tiempo de Dios, o El les tiene algo mejor.
Nos detenemos un poco en el primer caso del párrafo anterior. Las Almas que han sido abusadas sexualmente en alguna etapa de sus vidas por ejemplo, viven en un estado de terror permanente, son desconfiadas, y no aman la vida.
Es realmente un reto ayudar a estas Almas, porque están cerradas a las actitudes positivas. Creen que todo el mundo las va a maltratar, y un acto de bondad, lo ven como una amenaza. Otro ejemplo de sentimientos negativos en el Alma, es la mujer que no tuvo suerte en una relación.
Se siente víctima, y piensa que todos los hombres son crueles. Mientras esta Alma no modifique su forma de pensar, es muy difícil que atraiga al hombre de sus sueños.
Nos gustaría también referirnos a las personas que no están obteniendo resultados satisfactorios con sus peticiones. Las invitamos a que busquen otras formas de comunicarse con nosotros. Si un procedimiento en particular no les funciona, indaguen otros.
La duda, el temor, el resentimiento contra Dios, la desconfianza, la ira, el pesimismo, la vergüenza, y la culpa por citar solo algunos, son factores que inciden en los resultados de las oraciones.
Si oran a Dios pidiendo por la salud de alguien, pero interiormente piensan que va a morir o que Dios no los está escuchando, bloquean el poder de la plegaria. Cuando están haciendo un Código ¿creen que lo que piden les será otorgado?
Es el momento de hacer una amorosa introspección Hijitos. No se trata solo de pedir, sino de ESCUCHAR CON EL CORAZÓN LAS RESPUESTAS.
Si solicitan algo, estén muy atentos a los pensamientos, los sentimientos, las corazonadas y todo lo demás que les llegue.
Bueno mis Amores, ya les dejamos suficiente tema para meditar.
Yo Soy María, la que les ofrece los Tesoros del Tribunal Kármico.”
Canalizado por José Gabriel Agesta.
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